Por: RPK Noticias
La Policía decidió abrir un proceso interno contra los uniformados señalados por la balacera de Desaguadero, en la frontera con Perú. Los siete efectivos de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCN) que están vinculados en los hechos de sangre sucedidos en la localidad fronteriza de Desaguadero tenían que ver con un presunto volteo de 100 kilos de cocaína y $us 120 mil.
En principio, se había hablado de un operativo encubierto legal contra el narcotráfico. La sargento Sonia Capquique Huarachi murió en el lugar y el sargento Grover Layme quedó gravemente herido y aún lucha por su vida. Una persona civil también murió.
En las últimas horas han circulado supuestos informes de Inteligencia que han sido desvirtuados por la Policía, en los cuales se da cuenta de un “volteo”, es decir, los uniformados pretendían quedarse con las drogas.
Sin embargo, aparentemente la muerte de la sargento no ha consternado a la fuerza del orden puesto que no publicó la habitual muestra de pesar en sus cuentas de redes sociales. Fue enterrada sin honores, como una persona civil.
“Son dos casos que están siendo investigados, que han sido identificados y será en materia penal lo que vaya a establecer el director funcional del caso (la fiscalía) y en el ámbito disciplinario los mismos están siendo procesados”, dijo el inspector general de la Policía, general Ricardo Pérez, reportó el diario El Deber.
El hecho sucedió el 22 de septiembre en la carretera a Corpa, muy cerca de la localidad de Desaguadero. La sargento trabajaba en Santa Cruz, pero estaba con vacaciones.
Hubo una disputa que concluyó en la balacera y los delincuentes se llevaron el dinero y la droga, señala el diario cruceño.
El río Desaguadero está a menos de dos minutos de la carretera y fue por ese lugar que los delincuentes escaparon a Perú.
