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Aymara Quispe (AQ) es una artista alteña que decidió emigrar a Europa con sueños y maletas cargadas de creatividad. Su talento, profundamente arraigado en sus raíces indígenas, fue rápidamente valorado en tierras foráneas. Su amor y pasión por ser embajadora nacional la impulsaron a mostrar la rica cultura boliviana, a través de sus obras de arte. La mujer de tres lenguas triunfa y echa raíces en los Países Bajos.
¿Qué siente al haber llegado a su tierra natal, El Alto?
AQ – Me siento tan bienvenida en este hermoso jardín que es El Alto, donde estoy de visita. Por circunstancias de la vida estoy encantada de retornar al lugar que me vio nacer y crecer.
¿Quién es Aymara Quispe?
AQ – Nací en El Alto. En cuanto a mi trayectoria, aproximadamente, en el año 2002 ingresé a la carrera de Artes Plásticas en la Universidad Mayor de San Andrés. Estuve ahí por tres años hasta que llegó mi bendición, mi hija Giselle van Engelenburg y ya no pude culminar la carrera. Sin embargo, seguí intentando hacer arte, realizar exposiciones y vender mis obras, pero no me fue bien. Por ello, decidí estudiar otra carrera, Derecho. Trabajé tres años como abogada penalista y, durante ese tiempo, llegó de Países Bajos quien es ahora mi esposo, Tom Van Engelenburg. Nos conocimos y creo que le gustó la ‘cholita’ que soy. Emigré por amor y nos fuimos a Europa con mi hija.
¿Cuál es tu trayectoria artística?
AQ – Tuve que hacer un máster debido a mis buenas notas y mi récord académico. Me reconocieron el diploma y me habilitaron para hacer un máster en idioma neerlandés. Ahora estoy en camino de terminar mi máster. Sin embargo, como mujer alteña, emprendedora y trabajadora, pese a que mi esposo nos cuida muy bien, tengo que tener mi propio dinero. Eso es lo que nos enseñan las madres, a tener nuestra independencia económica y ser trabajadoras.
Emprendí en un atelier (espacio de trabajo donde los artistas crean y desarrollan sus obras de arte), que es una empresa legalmente establecida en Países Bajos. Esta empresa no solo me da la oportunidad de vender mis obras, que son de temática alteña, de mi cultura, de mis raíces, de la identidad, del acervo cultural y nuestro folklore, sino también de compartir nuestra historia con los europeos, quienes se interesan y quieren tener algo nuevo y diferente en sus casas, oficinas y en sus vidas.
¿Qué tipo de arte realizas?
AQ – Mis obras son básicamente óleos sobre lienzo con incrustaciones de pedrería, lo que nos caracteriza como nuestro folklore.
¿Qué quieres mostrar con tu arte?
AQ – Quiero que sepan que en El Alto existe y vive una sociedad de gente profesional, letrada, inteligente, con mujeres que han sacado adelante a nuestra ciudad. La mujer es quien más ha trabajado, ha puesto el hombro y ha emprendido, incluso con sus hijos, logrando tener el deseo de salir adelante.
¿Cuál es tu mayor inspiración?
AQ – Mi inspiración es el extrañar el lugar donde nací, que es El Alto. Empecé a plasmar todo lo que me identifica, todo lo que extraño y todo lo que he visto mientras crecí ahí.
¿Qué mensaje dejarías a los nuevos artistas?
AQ – Quiero decir a mis hermanos artistas que no se limiten en la creatividad, deben seguir creando pese a cualquier cosa que les puedan decir. Es difícil, es una carrera compleja la que hemos elegido, pero es nuestra.
Les aconsejo que además de aprender lo técnico, sepan cómo vender su producto, cómo difundir sus obras, aprendan a hacer cosas de calidad y de presentación.
¿Cuál es tu agenda, ahora que estás en El Alto?
AQ – Vamos a realizar una exposición y charlas para compartir con los estudiantes y gestores culturales, sobre cuál es la mejor forma de exportar nuestro arte, porque el arte y la cultura es lo más preciado que tenemos.
El Alto es tu inspiración…
AQ – Nuestra querida ciudad de El Alto, esta hermosa tierra que es cuna de valientes, de mártires que han dado la vida por este presente que hoy tenemos y el gran futuro que nos espera. Esta ciudad es el oro del futuro de nuestra Bolivia.
Prensa alcaldía de El Alto
